Patagonia Chilena Carretera Austral

Publicado 2020-07-20
Carretera Austral tramo Lago General Carrera - Chile Chico - Villa O'Higgins - Lago O'Higgins

Todos los comentarios (3)
  • Recuerdos esos lindos parajes y bosques la hermosa caleta tortel haber caminado por esas pasarelas hace 22 años atras siendo marino nuevito 😍😊 haber navegado esos canales australes tan maravillosos nose cuantas veces ida y vuelta al sur ,cabo de hornos puerto williams ,antartida en el tomatito gracias por este video
  • @olimpiablu8070
    La Odisea Belga : ********************* Es una hermosa historia de la vida de un grupo de familias belgas que llegaron a instalarse como colonos en las inmediaciones del Lago General Carrera,  inmediatamente después de concluida la Segunda Guerra Mundial. Se inicia con una extraña caravana de vehículos, camiones, vehículos anfibios, grúas, autos y otros armatostes deshechos de la guerra, que pertenecían a los integrantes del grupo belga que acababa de arribar al puerto de Punta Arenas con miras de alcanzar por tierra argentina los márgenes del lado sur del lago General Carrera, toda vez que por territorio chileno no había acceso terrestre. ¿Cómo llegaron a ese territorio patagónico salvaje? ¿Por qué decidieron emprender esa empresa a todas luces loca? ¿Quiénes eran esas personas, hombres, mujeres y niños que la integraban? ¿Cómo y de qué forma vivirían en esas soledades? ¿Qué coraje interior los mantuvo unidos en permanente lucha con los elementos del medio? : el frío, el viento desatado, las tormentas, la falta de caminos, la ausencia de comunicación terrestre, la inexistencia de electricidad, agua potable y otros adelantos básicos…en fin ¿A quién se le podría ocurrir una locura así? La causa de su llegada a nuestro país fue la Segunda Guerra Mundial que había destrozado Europa y Bélgica no fue una excepción. El jefe de las familias había decidido macharse con todo a un lugar alejado de las guerras y el gobierno de Chile les había abierto una posibilidad en aquellos territorios patagónicos perdidos y casi deshabitados. Se instalaron en Chile Chico y hubo que empezar de cero. Construir una casa en la inmensidad de la pampa, obtener agua, comenzar una huerta, abrir un espacio en la montaña para instalar un aserradero, elaborar las maderas y trasladarlas a través del lago.  Cómo lo hicieron? Con el aporte de todos lograron adquirir una embarcación y trasladarla desde el Atlántico hasta el Lago General Carrera a través de la pampa argentina por caminos intransitables, una odisea. Entre los colonos venían un par de ingenieros, un médico, un cura, un mecánico, todos los cuales mantenían una férrea unión ayudándose unos a otros en todo lo que fuera posible para sobreponerse a las múltiples adversidades del medio. El médico León Cardyn asistía a los colonos en sus diversas enfermedades y a las madres durante los partos o intervenía quirúrgicamente si la situación lo exigía con los mínimos elementos disponibles. Y así se fueron gradualmente adaptando a ese territorio hostil hasta asentarse con diversas actividades productivas, intentando mantener las mismas costumbres de la lejana Bélgica, especialmente la música y la lectura, al cultivo de plantas en los jardines y huertas, la ganadería y la agricultura con la ayuda de unos pocos lugareños con quienes tuvieron una muy buena convivencia. Los niños se adaptaron admirablemente al frío patagónico de los inviernos y al calor de los veranos, especialmente excursionando hacia los cerros cercanos, hacia los valles, las lagunas y los montes impenetrables del Oeste por el solo afán de hollar el inconmensurable y hermoso paisaje patagónico y sentir intensamente ese magnífico valor de la libertad. Eran los jóvenes los exploradores, los que descubrían nuevos senderos, nuevos pasajes, nuevos valles susceptibles de colonizar. Especialmente en las vacaciones de verano partían a caballo llevando a cuestas sus carpas y sacos de dormir, algunas provisiones y carne de cordero cocida para varios días. Las cabalgaduras se prolongaban por días o semanas. El pasto abundaba por todas partes, como también los zorros y los pumas, los peligros y las dificultades, especialmente al vadear los ríos cuyas intensas corrientes suelen llevarse al caballo y al jinete consigo. Con todo, la formación patagónica hizo de niños y niñas belgas hombres y mujeres fuertes, valientes y capaces de sobreponerse a las dificultades que les antepuso la vida. Ya cuando grandes, añorarán la rudeza de la vida en esa Patagonia fría y ventosa, incierta y peligrosa, aislada y silenciosa, rústica pero amada por todos. ********************* Para quienes quisieran conocer más de esta historia existe un libro titulado "Cuando éramos niños en la Patagonia" hermoso libro, se puede encontrar a través de internet o en la "Hostería de la Patagonia" en Chile Chico, aún  perteneciente a una de estas familias.  También en un video en YouTube "los  Belgas en la Patagonia" programa,  Al Sur del Mundo.